Listamanía: 4 estupendas colecciones de libros para bebés + 2 libros. ¡Todos a mirar y leer! (y tocar y jugar y cantar...)
Para aquellos que dicen que "no leen todavía" pero les fascina ver en los libros objetos familiares y extraños. Para los que gustan del momento compartido entre adultos y pequeños con un libro entre las manos. Para los que empiezan a descubrir el mundo, en una habitación. También para aquellos peques que usarán estos libros como sombrero, como algo para agitar y probar la fuerza de las manos, como algo para lanzar inesperadamente y observar que lo que hay dentro sigue ahí, esperando ser mirado otra vez. Para esa edad maravillosa en que todo está por hacer y un libro es una excelente compañía. Aquí van algunas colecciones recientes: libros robustos y pequeños a la vez, para que sean tocados y hasta mordidos.
1 Hervé Tullet es un gran maestro para los más pequeños: sus ingeniosos libros están llenos de humor, creatividad y emoción. A los libros que ya conocemos de él en Kókinos (dos de mis favoritos: Un Libro y Sin titulo), los geniales que publicó en Phaidon , o los estupendos que han ido apareciendo en la editorial Cocobooks, se añaden ahora dos más publicados en la joven editorial Patio, cuyo nombre editorial es toda una declaración de principios ("el mejor lugar para los niños").
¿Pequeño o grande? y ¡Ya llego! son dos libros troquelados que juegan con la sorpresa, el movimiento, el pasar páginas como una aventura llena de emociones y suspense, como el pez que se va comiendo a los pequeños y engorda hasta que su tamaño resulta relativo al final. O el viaje de un cochecito por la ciudad hasta llegar a un lugar importantísimo... Los textos son onomatopeyas que imprimen ritmo y diversión a estas lecturas.
¿Pequeño o grande?
¡Ya llego!
2 De la mano de la querida Mar Benegas (de quien ya hemos hablado aquí) aparece en la editorial Combel una colección llamada La Cereza, dirigida a los más pequeños, para empezar a disfrutar la rima, el ritmo, la risa y el juego. Tres títulos se han publicado: ¿Le pondremos un bigote?, Diez ardillas y Ñam Ñam, tres pequeñas joyitas para que los niños descubran el humor de las palabras, las cosas cotidianas dadas la vuelta, la sencillez de lo que nos rodea y la poesía en su estado más puro. Cada libro lleva ilustraciones diferentes (de Lalalimola, Marta Cabrol y Laurence Jammes) e incluye al final, un código QR para descargar la canción que le corresponde. Una alegría que haya creadores españoles ocupándose de los más chiquitos y una alegría que haya editores apostando por ellos.
Diez ardillas. Ils. de Laurence Jammes
¿Le pondremos un bigote? Ils. de Lalalimola
3 El sello infantil Nandibú de la editorial Milenio, tiene una colección en cartoné para los más pequeños titulada "Placeres" que ya lleva más de siete títulos y son una buena excusa para mirar dibujos llenos de detalles. Los libros están escritos e ilustrados por Roger Paré y adaptados al español con rimas sencillas. El circo, la música, la lectura, el invierno o, simplemente, cosas que nos gustan son algunos de los temas que se presentan.
4 No puedo esconder que esta colección me ha encantado. Cuatro libros escritos e ilustrados por la alemana residente en Estados Unidos Katrin Wiehle, cuatro libros que comienzan con "mi pequeño" y presentan escenarios naturales: Bosque, Estanque, Selva, y Jardín. Cuatro libros, además, hechos 100% naturales (100% papel reciclado y con tintas ecológicas ¡se puede y queda estupendo!). La editorial que los ha publicado en España es Ediciones Lóguez y estos libros divertidos, sensibles y llenos de encanto. De hecho, el libro dedicado al bosque recibió en el año 2013 el Premio Libro Alemán más Bello. Ni más ni menos: un libro de apenas 16 páginas, impreso en un papel mate marrón que contrasta de manera singular con la "belleza" de muchos de los libros para niños que se publican hoy. Y, si, es un bello libro informativo en una interesante colección.
Mi pequeño Bosque
Hay algo muy entrañable en esta serie de libros. Una ilustración sencilla y muy vivaz, con animales expresando algo más de lo que dice el texto. Un texto que va contando en primera persona, con un plural metafórico de los animales retratados, lo que le permite a la autora una mirada personal de un mundo donde todos se divierten, comen cosas ricas, descubren, juegan, echan carreras, viven en comunidad y, sobre todo, hay mucho mucho para descubrir en pocas páginas. No es extraño que estos libros sean premiados y queridos: hay montones de cariño, muchas ganas de mostrar a los más pequeños el mundo rico y variado de la naturaleza, y suficientes elementos como para mirarlos una y otra vez, sin cansarse.
Mi pequeño estanque
Mi pequeño jardín
¡Voy a jugar! de Edurne Lacunza (Ekaré)
Acertadísimo recurso de utilizar un animal tan fantástico como el armadillo para crear una divertida historia para los más pequeños. Tatú decide un día ser un poco gamberrete y se enrosca para hacer que es una pelota. Sus amigos, el colibrí, el tucán, el tapir y el ocelote, entran más o menos al juego hasta que Tatú descubre su identidad. Un libro basado en el tan querido juego de los niños de intentar desaparecer que incluye animales autóctonos, lo que le da un color y una diversión singulares.
Y el último que recomendamos es ¡Buen viaje, bebé! de Beatrice Alemagna (A Buen Paso), un precioso libro de hojas semiduras, rico en pequeños detalles que harán las delicias de los más pequeños. Ya en las guardas llenas de nubes, nos ponemos a pensar que los viajes se hacen con los ojos abiertos pero también con los ojos cerrados. Porque el viaje que emprende el bebé protagonista no es ni más ni menos que el que hacen, cada noche, todos los niños: irse a la cama. Pero como es un viaje muy especial hay que prepararlo con mimo y cuidado: hay que llevar las cosas favoritas, darse un buen baño, ponerse el traje de super aventura, dar besos y conectar el juguete que permitirá la transición. Un libro delicado donde se aprecia el amor y el calor de la familia, donde se reinvidican las rutinas favoritas de los niños. La metáfora del viaje es una genialidad que revela la sensibilidad de Alemagna al pensar en los más pequeños. Todo ello con las ilustraciones de una creadora que da en este libro un estilo inimitable alejado de los tópicos que se suelen encontrar en los libros para los más pequeños. Es, por decirlo de alguna manera, el primer libro-álbum que puede encontrar un bebé. ¡Y de qué manera!
Por cierto, que este libro fue elegido en Francia, en la región de Archède, para un proyecto de promoción de la lectura para recién nacidos llamado Les bebés aiment les livres. Todos los niños recién nacidos entre 2014 y 2015 fueron obsequiados con este libro. ¡Qué regalo!